
La obra de Christian Schad (Miesbach, Alemania, 1894-1982) se inscribe dentro de muchos movimientos: Dada, Verismo, Expresionismo y, especialmente, Nueva Objetividad. Este movimiento tuvo una vida muy breve (entre 1919 y 1933) debido al auge del nazismo. Nacida en el seno del expresionismo es, en cierto sentido, una revuelta contra el mismo. Tiende a focalizarse más en referencias sociales – crítica a la sociedad burguesa y al estamento militar, especialmente – que en la expresión de los sentimientos, generando una pintura de carácter más realista. A este movimiento pertenecieron Max Beckman, ya tratado como expresionista en este blog, Otto Dix, o George Grosz. Las connotaciones sexuales están muy presentes en la obra de este autor, que lo aproximan al destacado expresionista austriaco Egon Schiele.






