Godwin Bradbeer (Nueva Zelanda, 1950) es un destacado artista que ejerce su actividad en Australia. Es creador de una obra oscura, de grandes dimensiones, en las que su carácter expresionista se manifiesta tanto en sus formas como en el método de gestación de las mismas, con un fuerte grado de intervención al modo de los expresionistas abstractos americanos de la postguerra. Intenta fusionar dibujo y pintura confiriéndoles corporeidad, carácter matérico. Sobre su particular técnica el artista hace un amplio uso de los lápices Chinagraph, diseñados para pintar sobre cristal. El mismo comenta:
«Chinagraph es ceroso y grueso, permite dibujar sobre cualquier cosa y es ligeramente translúcido. Admite los gestos amplios y dinámicos y, de manera bastante maravillosa, al describir la carne, más que ilustrar el cuerpo parece generar el cuerpo mismo. Sentí que había encontrado un punto intermedio entre la pintura y el dibujo. Entonces, un día en 1974, después de agregarle azúcar al té, froté descuidadamente la cuchara de plata contra el perfil blanco de chinagraph que estaba dibujando y el bruñido arrojó un brillo metálico muy ligero sobre el blanco, pero, más notablemente, el óxido de plata ennegreció los bordes del dibujo y el perfil «saltó» en un relieve ilusorio, precisamente como ocurre con las fotografías solarizadas de Man Ray.»






