La obra fotográfica de Lukas Samaras (Kastoria, Grecia, 1936) es compleja, dado su carácter introspectivo. Samaras es un fotógrafo que llega a este campo después de haber practicado la pintura y escultura y, especialmente, desde el conocimiento del cuerpo que le proporciona haber sido un intérprete de performances. Sus imágenes son autorretratos en los que se mezclan técnicas fotográficas e informáticas, transformaciones de las capas de polaroid y efectos distorsionantes de distintos tipos. El resultado, enigmático, dice reflejar su historia personal. Extrañamente seductor.













