Christoffer Wilhelm Eckersberg (Blakrog, Dinamarca, 1783-1853) está reconocido como una de las figuras más destacadas del neoclasicismo, y se le considera como «el padre de la pintura danesa». Fue profesor y director de la Academia Real de Bellas Artes de Dinamarca y en su formación contribuyó decisivamente su estadía, durante tres años (a partir de 1810), en el taller de Jacques Louis David. David sólo utilizaba modelos masculinos, por lo que Eckersberg se vio obligado a contratar, de su bolsillo, a una modelo femenina: Emilie. Las obras de carácter mitológico-histórico no tienen, a mi opinión, la importancia de las de David, cuyas complejas composiciones con numerosos personajes son sobradamente conocidas, pero logra retratos de extraordinaria factura y elegancia, con una mayor importancia de la mujer.

Modelo masculino con una bara – Eckersberg

Desnudo recostado – Eckersberg
Joven sentado (izquierda) – Tres jóvenes espartanos (derecha) – Eckersberg
Sócrates y Alcibíades (izquiera) – Ulises en la cueva de Polifemo (derecha) Eckersberg

Modelo desnudo sentado – Eckersberg

Desnudo femenino reclinado – Eckersberg

Mujer delante del espejo – Eckersberg

Joven arquero afilando la flecha – Eckersberg

Mujer desnuda poniéndose las zapatillas – Eckersberg

Modelo desnuda sentada – Eckersberg