En la obra escultórica de Alison Saar (Los Ángeles, California, 1956) encontramos una reflexión sobre identidad y cultura, sobre la diáspora cultural africana, mujer y feminismo… Un mundo de gran belleza construído con materiales diversos y objetos encontrados; sereno, reflexivo y sin estridencias. Junto a la obra escultórica sus grabados reflejan la misma iconografía y me recuerda, en ocasiones, la obra de Frida Kahlo.