François Duquesnoy (Bruselas, Bélgica, 1597-1643) fue un destacado escultor barroco con un estilo que, más contenido, se oponía a la teatralidad de Bernini. Pese a ello, trabajó bajo sus órdenes en la decoración del famoso baldaquino de San Pedro de Roma. Aunque realizó obras monumentales, su mejor producción se asocia a obras de pequeño formato.
Permítanme una pequeña curiosidad. Su padre Jerome Duquesnoy es autor del popular «Manneken Pis» de Bruselas.