Marchemos hacia atrás en la historia para conocer la transición entre el Renacimiento y el Barroco en Italia. El paso del siglo XVI al XVII es este país tuvo dos figuras centrales con características bastante diferentes. De un lado Michelangelo Caravaggio que evoluciona desde el manierismo y desarrolla un claroscuro muy drástico, con fuertes negros, y del que deriva todo el barroco, y por otro Annibale Carracci, que rechaza el manierismo, busca el equilibrio clásico y genera una obra más fría basada fundamentalmente en fuentes mitológicas. Carrachi será el enlace entre Renacimiento y el Neoclasicismo. Uno de sus sucesores más destacados fue Guido Reni (Bolonia, Italia, 1575-1642). Como Carracci su temática es fundamentalmente religiosa y mitológica pero pienso que, en algunas de sus obras se aprecia ya algo del impulso revolucionario de Caravaggio.

Baco y Ariadna – Guido Reni

Polifemo – Guido Reni

Cupido – Guido Reni

Amor sagrado y amor profano – Guido Reni

Fortuna – Guido Reni

Susana y los viejos – Guido Reni

Hércules venciendo a la Hidra de Lerma – Guido Reni

El suicidio de Cleopatra – Guido Reni

Lucrecia – Guido Reni

Hipónemes y Atalanta – Guido Reni