Reputado internacionalmente, Danny Baldwin (Londres, Reino Unido) es un fotógrafo que viene del mundo de las revistas de moda y que el pasado mes de abril nos presentó una colección fotográfica que, bajo el título «Skin Deep«, mostró una colección de un centenar de obras en blanco y negro, en el que un hombre, usualmente desnudo, enseña una piel tatuada, caligrafiada en ocasiones en su totalidad. El autor señala que se trata de modo de reafirmación propia (el mismo indica que tiene varios tatuajes) y al mismo tiempo de una reivindicación del cuerpo tatuado en el mundo de la moda. No sé hasta que punto logra este objetivo porque el tatuaje, de un modo tradicional, siempre se ha visto asociado con elementos cultural o socialmente marginales (hoy diríamos contraculturales), si bien en fechas recientes lo vemos con frecuencia de la mano de los nuevos ídolos deportivos. En cualquier caso nos deja imágenes con fuerza y capacidad de seducción. Una fuerza generada por el fuerte contraste con los fondos negros y que parece adquirir un tono físico cuando las figuras se ven constreñidas en marcos geométricos.
En la exposición citada también se expuso un interesante video que ahora podemos ver en YouTube.