No resulta sorprendente que numerosos aristas románticos consagrados, en el siglo XIX, se dedicasen a la ilustración erótica empleando pseudónimos. Estas obras se distribuían en pequeños fascículos o panfletos, por subscripción, o servían para ilustrar conocidas obras literarias editadas clandestinamente. Este es el caso de Édouard-Henri Avril (Argel, Argelia, 1849-1928), artista francés que, con el pseudónimo de Paul Avril, creó una cantidad muy importante de grabados e ilustraciones que podríamos considerar como pornográficas por su sexualización extrema. Nos ilustra todo tipo de posturas y técnicas tanto heterosexuales como homosexuales gays y lésbicas. Con todo, esta actividad no debió ser demasiado mal vista puesto que Édouard-Henri Avril, considerado por algunos como el padre de la pintura erótica, fue Caballero de la Orden Nacional de la Legión de Honor en 1871.
La colección que nos muestra Wikimedia Commons es muy superior a la que aquí presento.















