Bueno, es verdad, el Charco del Palo no es estrictamente un pueblo sino un amplio enclave situado en la costa de Mala, un barrio de Teguise (Lanzarote). Su amplitud, y su separación de cualquier otro lugar del municipio, permite considerarlo como un pequeño pueblo, aunque sus únicas infraestructuras sean un par de bares y un pequeño supermercado. Pero tiene una cualidad fundamental: es nudista. Por su amplia costa y por sus calles podemos pasearnos desnudos. El tráfico rodado se ve detenido en las entradas de las urbanizaciones, mientras que la línea de costa permanece natural, sólo accesible a caminantes. Una costa que nos lleva a dos piscinas naturales que llena la marea, y un pequeño dique que nos da acceso al mar libre. Es una zona de «malpaís», áspero territorio volcánico que se ve salpicado por zonas de arena dorada. Podemos pasear desnudos varios kilómetros. No hay ruido. Sólo se escucha el mar.

Ayer llegamos de pasar una semana en ese maravilloso lugar. Habíamos estado con nuestros hijos hace más de 20 años. Pese a que la distancia en el tiempo magnifica los recuerdos agradables, no nos decepcionó de ningún modo. Un poco más grande, pero esencialmente igual. Un lugar encantador para desconectar y descansar plenamente.

Quisiera poder mostrarles mejor este maravilloso lugar, pero el respeto debido a las personas desnudas me impidió hacer fotos más detalladas de la urbanización.

El sol amaneció de este modo para despedirnos: