Keith Vaughan (Selsey, Reino Unido, 1912-1977) es, posiblemente, un pintor británico poco conocido en nuestro país, pese a algunos elementos de su biografía personal pueden inducir a un cierto morbo: Inició su carrera profesional durante la Guerra Mundial en la que fue objetor de conciencia, fue un reconocido homosexual y se suicidó después de habérsele diagnosticado un cáncer. Su pintura, centrada en las formas masculinas, parte de un neo-romanticismo para derivar rápidamente en un expresionismo cada vez más abstracto y forma hoy parte de las colecciones de grandes museos y galerías (Ver, por ejemplo, su página de la Tate).
Pingback: El desnudo en el arte: Cornelius McCarthy | migueldesnudo