La representación de las figuras de Adán y Eva cumplió, en sus inicios, el papel de ilustrar un “hecho” bíblico pero también, y para el artista, supuso la posibilidad de pintar con relativa libertad el cuerpo humano desnudo. Incluso durante el renacimiento italiano en el que la sociedad se encontraba menos teocratizada y las influencia del redescubierto desnudo greco-romano se iba abriendo paso, el peso de la iglesia era muy fuerte. Poco a poco el desnudo en nuestra sociedad occidental se disfrazó de mitología de la que sólo se liberará, de un modo general, en el siglo XX. La supuesta imagen de Adán y Eva perdió tanto la escusa religiosa (la sociedad se había ido secularizando) como la de transgresión sexual y, cuando nos la encontramos en el siglo XX sólo parece mostrar los numerosos debates estéticos. Por ese motivo les invito a un ejercicio sobre este tema dividido en dos test diferentes que corresponden a dos realidades sociales también muy diferentes.
Test nº 7: Adán y Eva (hasta el siglo XVIII)
Test nº 8: Adán y Eva (desde el siglo XIX a nuestros días)
Como siempre, las imágenes han sido reproducidas, previamente, en este blog.